terraza protección solar Barcelona
Edificio de viviendas para 4 amigos / Lussi+Partner AG + Lola Domenech

LA COOPERATIVA DE VIVIENDAS: HÁZLO TÚ MISMO.

Desde hace un tiempo, ha llegado a nuestro país un nuevo concepto de promoción inmobiliaria: las cooperativas de viviendas. Creemos que es un modo muy interesante de promover, y por ello les dedicamos este artículo, enfocándolo desde el punto de vista de la arquitectura. 

En nuestra experiencia en el extranjero tuvimos ocasión de verlas en funcionamiento (en general es un formato que lleva muchos años de recorrido por centroeuropa) y que empieza a verse en nuestro país como una alternativa más atractiva en muchos sentidos a la promoción tradicional.

¿CÓMO FUNCIONA UNA COOPERATIVA?

En la promoción tradicional, la empresa promotora compra el suelo, encarga el proyecto a los arquitectos y demás técnicos, y pone a la venta las viviendas, obteniendo un beneficio en el proceso. También asume, de la misma manera, todos los riesgos inherentes al proyecto. 
La cooperativa en cambio, es una asociación de individuos, con personalidad jurídica propia, y que está regulada por la Confederación de Cooperativas de Viviendas (CONCOVI), que se unen para desarrollar juntos un proyecto, con la finalidad generalmente, de obtener una vivienda más económica (al no haber beneficio de promotor)  y más personalizada. 
Para ello se contrata a una empresa especializada  (gestora de cooperativas de viviendas), que ayuda a los cooperativistas durante este proceso.

Es cierto que la cooperativa presenta también otros riesgos, al no estar respaldada por una empresa promotora. 

 

PROS Y CONTRAS DE LAS COOPERATIVAS DE VIVIENDAS

 PROS

-Al ser la Cooperativa una entidad sin ánimo de lucro cuyo objetivo es construir viviendas a precio de coste para los cooperativistas, el precio suele ser la ventaja principal de la que se habla.
-Generalmente se consiguen de esta forma viviendas en torno a un 20% mas baratas que en el mercado libre, dependiendo del caso, al no haber beneficio del promotor.
-Las cooperativas gozan también de una fiscalidad ventajosa, al estar exentas del impuesto de Actos Jurídicos Documentados (1%), y del IVA al comprar el suelo.
-Se permite también una mayor personalización de las viviendas, y votar cada paso del proceso. 

 CONTRAS

 -Generalmente se requiere una aportación mayor de inicio, lo cual supone en muchos casos una barrera de entrada difícil de franquear
-Hay cierta inseguridad. Al comprar una vivienda a una promotora se firma un contrato sobre un precio cerrado. En una cooperativa puede haber en ocasiones imprevistos y sobrecostes inesperados que los cooperativistas tienen que sufragar en conjunto. Por ello es muy importante contar con una buena asesoría técnica por parte de la Gestora, y un proyecto arquitectónico muy detallado que evite sorpresas inesperadas.

LA ARQUITECTURA EN COOPERATIVA

En general, desde el punto de vista de la arquitectura, es muy interesante trabajar para cooperativas: 
Normalmente, al diseñar viviendas para promotores, aún no se sabe quien va a habitar las viviendas, así que en gran medida se acaban realizando proyectos un poco más genéricos, que sean comerciales y que puedan gustar a un amplio abanico de clientes, ya que aún no han sido comercializadas. Se acaban usando materiales y distribuciones algo mas “neutrales”y “para todos los públicos”.
En cambio, al trabajar para cooperativas, se permite un grado mucho mayor de personalización, al ser los clientes los promotores, y los futuros habitantes del edificio.
Muchas veces los miembros de una cooperativa son amigos que deciden promover para vivir juntos (formato conocido actualmente como CoLiving).
Este tipo de cooperativas suelen pedir zonas comunes generosas, y espacios comunitarios como por ejemplo gimnasio, barbacoa al aire libre, cuartos de bicicletas, etc etc… Todas estas decisiones en cuanto al rumbo del proyecto se votan en asambleas, con lo que la carga de trabajo para los arquitectos es mayor, pero también lo es el grado de personalización y satisfacción del cliente.

Creemos que el formato de promoción en cooperativa ofrece unas posibilidades muy buenas tanto para los futuros habitantes como para los diseñadores, de realizar viviendas que rompan el molde.

Actualmente nos encontramos colaborando con Coopera Gestora  con la intención de formar una o varias cooperativas de viviendas en la zona de la Axarquía, cerca de Málaga. 

¡Os mantendremos informados! Mientras tanto os dejamos con unos ejemplos seleccionados:

R50 – Cohousing (Berlín, Alemania) Archdaily

Tuvimos la suerte de poder visitar este edificio que vio la luz en 2013 y fue gestionado en régimen de cooperativa.
19 viviendas para 19 clientes que comparten un espacio multiusos con doble altura en planta baja (recordamos que durante la crisis de los refugiados de 2015, los cooperativistas decidieron adaptar el espacio para acoger a 2 familias). Las viviendas no solo comparten una terraza comunitaria en la cubierta del edificio, completamente amueblada y con un huerto urbano, sino que la galería que rodea cada planta del edificio es de libre acceso para todos los habitantes de esa planta. 

Maierhof Housing Development – Feld 72, Archdaily

En la región Austriaca de Voralberg, al pie de los Alpes, se encuentra Bludenz, en la cual el estudio con base en Viena Feld72 ha completado este interesante conjunto residencial de baja densidad. Las edificaciones de no más de 3 plantas se fragmentan dejando espacios libres semi-publicos entre las viviendas, cuyo mantenimiento se realiza a partes iguales entre los cooperativistas y la municipalidad.  Juegos infantiles, cuartos comunes multiusos, zonas ajardinadas compartidas y cubiertas verdes en todos y cada uno de los 8 edificios son algunas de las características que definen este proyecto en cooperativa.